lunes, 19 de marzo de 2012

Tocar el piano y romper a llorar…




Cada tecla pulsada, una lagrima, y cada acorde un sentimiento.

A veces es la única forma de expresar las cosas, que ni en la cabeza tienen sentido, pero una melodía dejar fluir tus dedos haciendo que todo se ordene, por un momento no sea difícil, mientras sigas tocando esa melodía todo parecerá bonito, parecerá ideal, parecerá posible…

Pero en el fondo sabes que en algún momento tendrás que quitarte las lágrimas de la cara para poder ver y que esa melodía se romperá , y volverás a la realidad, en la cual nada es tan idílico.

Dejar volar los dedos y los sentimientos, tocar sin una partitura delante, al ritmo que tú le quieras dar, la sensibilidad de cada momento y la despreocupación deque alguna nota salga mal…
Si sale mal, es que nada puede ser perfecto, y en la imperfección, en los fallos, a veces está la belleza…

Puede quedar cómico en medio de una pieza, una nota suene mal, incluso puede “estropearla”, pero piénsalo… ¿Cuánta gente ha tocado esa misma obra bien sin defectos? En cambio, tu, al equivocarte, la has hecho especial… la has hecho única. Tuya.

Seguiré “haciendo especiales” obras, tanto en mi piano como en mi vida cotidiana…

http://www.youtube.com/watch?v=HMhcE6lBXvs

1 comentario:

  1. Wow. Me encanta lo que dices y como lo dices. Escribes realmente bien.
    Te sigo y te dejo mi blog. Sígueme si te gusta. Un abrazo! :)
    http://adultescentesms.blogspot.com.es/

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